Vehicle-to-Grid, o V2G para abreviar, es una tecnología que permite devolver energía a la red eléctrica desde la batería de un coche eléctrico. Con esta tecnología, la batería de un coche eléctrico puede cargarse y descargarse en función de diferentes señales, como la producción o el consumo de energía en las proximidades. En comparación con la carga inteligente normal, también conocida como carga V1G, la V2G va un paso más allá, ya que no sólo permite cargar los coches eléctricos de forma que la potencia de carga aumente y disminuya según la demanda, sino que también permite que la potencia cargada se devuelva momentáneamente a la red eléctrica desde las baterías de los coches para equilibrar las variaciones en la producción y el consumo de energía.

En lo que respecta a la producción de energía, la descarbonización se refiere al despliegue de fuentes de energía renovables, como la solar y la eólica. Dado que la energía debe utilizarse cuando se produce o almacenarse en algún lugar para su uso posterior, el crecimiento de las renovables provoca en consecuencia que nuestro sistema energético sea más volátil, lo que requiere nuevas formas de equilibrar y almacenar la energía que se va a utilizar. En la actualidad, el número de vehículos eléctricos (VE) no deja de aumentar, y las baterías de los VE son, con diferencia, la forma más rentable de almacenamiento de energía, ya que no requieren inversiones adicionales en hardware. A diferencia de la carga inteligente unidireccional, la V2G permite utilizar la capacidad de las baterías de forma más eficiente, convirtiendo la carga de los VE de una respuesta a la demanda eléctrica en una solución para las baterías.